El Gobierno ultima un plan nacional junto a la LFP

Al menos dos millones ven partidos de forma ilícita

Las pérdidas son millonarias todos los fines de semana. Las estimaciones apuntan que al menos dos millones de españoles están viendo el fútbol por vías no regularizadas. Pero no es sólo el fútbol. El año pasado, casi el 50% de los que vieron el Mundial de Motociclismo lo hicieron de modo ilegal. Lo mismo con la Fórmula 1. Y con el 70% de los que vieron 'Juego de Tronos', la serie de más éxito. España es uno de los líderes mundiales en piratería.

La implantación de las mafias es cada vez más potente. "Ya no se trata del típico listillo que es capaz de piratear unas claves que se las pasa a cuatro amigos. Se trata de mafias perfectamente organizadas y capaces de organizar la piratería en cuestión de segundos". La lucha contra los que roban contenidos intelectuales está siendo continua. "Pero no está siendo fácil acotar el campo, poner vallas al cielo". Aun así, la preocupación es máxima porque, como recuerdan estas fuentes relacionadas con la lucha contra la piratería, afecta a un importante número de consumidores cada fin de semana o entre semana con los partidos de Champions. No cabe duda de que entre los deportes el más afectado es el fútbol.

Por este motivo, según explican fuentes gubernamentales, se está ultimando un nuevo Plan Nacional de Lucha contra la Piratería en el fútbol, dirigido por el Ministerio de Cultura y cuyo brazo armado será el Ministerio del Interior. Su gran colaborador, la Liga de Fútbol Profesional.

Las operaciones que realizan tanto la Policía como la Guardia Civil se centran fundamentalmente en el último eslabón de la cadena. Ahora, se intentará llegar al origen. "Pero es complicado, hablamos de mafias tecnológicamente muy preparadas, y cuyos recursos principales para llevar a cabo sus actuaciones están fuera de nuestras fronteras. La colaboración internacional es clave".

Estas mafias estarían ubicadas en China y en las antiguas repúblicas soviéticas, según fuentes operativas. Logran, por ejemplo, colocar en el mercado descodificadores avanzados, que se distribuyen desde China y que pueden ser adquiridos en internet. La prioridad es cercenar ese mercado. Pero no es fácil, la legislación no facilita estas actuaciones y no se puede detener a quien compra. Localizar y desmantelar la trama es el objetivo. Pero el principal agujero está en las plataformas que retransmiten en 'streaming'.

Los golpes policiales son continuos, pero se quedan en el último escalón. El pasado enero, por ejemplo, la Policía detuvo al responsable de una tienda 'online' conocida como 'Padre de familia' por vender descodificadores de fútbol fraudulentos que adquiría a través de proveedores extranjeros. La Unidad de Investigación Tecnológica de la Comisaría General de Policía Judicial acabó con ese negocio ilícito que alcanzó transferencias de 100.000 euros. Pero falta ese paso más: visualizar por completo la pirámide de esta delincuencia hasta la cúspide.

Según explicaron a este periódico fuentes policiales, la Guardia Civil está culminando unas investigaciones sobre estas tramas, que arrancó hace más de dos años y afecta a una organización con ramificaciones en toda Europa.

El último informe del Observatorio de Piratería y Hábitos de Consumo de Contenidos Digitales señaló que en 2015 se accedió ilegalmente a 4.307 millones de contenidos digitales, con un valor de mercado de 24.085 millones, por lo que el coste del lucro cesante por la piratería fue de 1.669 millones. De ellos, 186 millones corresponden a la piratería de series, 573 a películas y 174 al fútbol.



El informe constata que, mientras seis de cada 10 internautas declaran acceder a contenidos ilícitos, sólo el 37% asegura no piratear en ningún caso. A la hora de piratear, el 62% de los usuarios se justifica argumentando que «"os contenidos originales son muy caros", aunque también aducen la "rapidez y facilidad de acceso" a los contenidos piratas (un 55%) o que "ya pagan su conexión a internet" (53 %).

El secretario de Estado de Cultura, Fernando Benzo, será quien pilote el nuevo plan nacional. Entre las iniciativas, la creación de una fiscalía especializada contra la piratería y la puesta en marcha de campañas escolares de sensibilización.


Fuente: El Mundo