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Tema : Mundial - Messi no estuvo tan lejos de ser el mejor  
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Predeterminado Mundial - Messi no estuvo tan lejos de ser el mejor


Mundial - Messi no estuvo tan lejos de ser el mejor

Lionel Messi, delantero argentino del Barcelona, fue consolado por la FIFA con el Balón de Oro al mejor del Mundial de Brasil 2014 pese a perder la final ante Alemania, decisión controvertida, una vez más, en el mundo del fútbol aunque los méritos del mejor jugador del fútbol moderno hayan evidentes.


Parece, no obstante, ser el sino de Messi, la controversia sobre su liderazgo en este siglo, pese a los mil y un detalles que deberían magnificarlo como el gran jugador que aún puede seguir siendo. Y en este Mundial se han empleado a fondo otros futbolistas que parecían políticamente más correctos como ganadores del Balón de Oro.

A saber, Thomas Müller, por contar con un representante del campeón aunque no exista esa costumbre histórica en la FIFA; el propio Javier Mascherano, impresionante por su capacidad de liderazgo en el centro del campo y hasta en la defensa de Argentina; o Arjen Robben, brillante y decisivo en las acciones individuales con Holanda.

Lo mismo que hay todo tipo de valoraciones para concluir que ellos también hubieran merecido el premio del Balón de Oro, Lionel Messi ha hecho lo suyo en el Mundial para que el trofeo ganado pueda considerarse apropiado.

Estos serían los motivos del nuevo éxito de Messi, rememorando partido a partido su actuación en el Mundial, que, de paso, fue de más a menos y partiendo de un punto tan bajo tras una temporada para olvidar con el Barcelona que casi nadie se esperaba el desempeño final del argentino, al que claramente le faltó un gol en la final o que la ganara simplemente Argentina para que con este trofeo individual no existiera la controversia actual.

Argentina-Bosnia Herzegovina: 2-1

Con una defensa de cinco y Messi arriba junto a su mejor amigo, el ‘Kun’ Agüero, el azulgrana brilló desde el comienzo, con tantos destellos que se asemejó al de antes, cima que seguramente no pisa desde hace dos temporadas o, más en concreto, desde la lesión muscular en el Parque de los Príncipes de París ante el PSG.

Y en esas, cuando tras un arranque fulgurante se había apagado ya un tanto Messi, apareció entre tanto bosnio para marcar un gol de tiro ajustado que supuso a los 64 minutos el momentáneo 2-0 de un 2-1 final. Fue un gol marca de la casa, arrancando desde la medular, tirando pared y agarrando de vuelta la pelota para cosérsela al pie, regatear y marcar desde el borde del área. Un gol y elegido Jugador del Partido.

Argentina-Irán: 1-0

Otro milagro de Messi llegó en el descuento, con un gol a los iraníes que le dio el segundo triunfo mundialista y la clasificación a Argentina. Messi tomó la responsabilidad en el minuto 90’+1 y, en una jugada también reconocible de su repertorio, se fue yendo desde la derecha hacia el centro hasta acabar chutando a media altura como un rayo. Pero fue un destello, ganador claro, porque su partido fue un atasco, como el del equipo, ante Irán. Pudo marcar en un par de libres directos y en otra arrancada que acabó en tiro que rozó el palo. Un gol y elegido Jugador del Partido.


Nigeria-Argentina: 2-3

El liderato del grupo lo conquistó Messi con dos goles de autor para derrotar a los nigerianos y devolverles la afrenta olímpica de 1996 en los Juegos de Atlanta. En esta ocasión, el 3-2 para los argentinos se logró gracias a imparable potencia de Messi al rematar un balón rebotado en el poste a los 3 minutos y al tanto de libre directo que anotó de manera perfecta con la zurda pegada al palo izquierdo de Enyeama. Y lo hizo segundos después de otra idéntica que sí salvó el meta nigeriano. Esta partido coronaba a Messi como el mejor del Mundial en la primera fase quizás en pugna con el brasileño Neymar, estrella de la entonces pujante selección local. Dos goles y elegido Jugador del Partido.

Argentina-Suiza: 1-0

Tras la fase de grupos, las eliminatorias, comenzando por octavos. Messi jugó su primer partido ante los suizos sin gol en el Mundial, pero resultó a la postre determinante al ser quien le dio el pase del gol en el minuto 118 a Di María. El gol que metió a Argentina en cuartos y le libró de los penalties frente a los correosos suizos. Messi se arrancó por el centro, sorteó rivales como una flecha, condujo y asistió a Di María, quien batió a Diego Benaglio de tiro cruzado. Durante el encuentro, además, sufrió una severa marca suiza, en ocasiones con cuatro rivales pendientes de él. Una asistencia y elegido Jugador del Partido.

Argentina-Bélgica: 1-0

Cuartos de final y un rival poderoso, la joven Bélgica que tanto prometía. Messi no se arrugó y dio probablemente el mejor pase de su carrera cuando tiró raso y en largo un centro hacia Di María, quien se lesionó en la acción al chutar a portería. Fue como billar francés, un pase con efecto final y caída hacia la derecha. Además, Messi comenzó la jugada del gol argentino, la del pase a las semifinales. Recibió en la medular, escapó de dos belgas girándose y abrió a la derecha para Di María, cuyo centro tocó en un defensa y habilitó a Higuaín para el gol argentino. Una asistencia y primer partido que no es elegido Jugador del Partido.


Holanda-Argentina: 0-0 (2-4 p.p.)

Louis van Gaal, perro viejo, preparó un cuidado especial para que Messi no tuviera la libertad vista en su juego durante la Copa del Mundo. Así que Messi tuvo que enfrentarse a un perro de presa como Nigel de Jong y, si este se despistaba, el central Ron Vlaar lo tenía siempre en su punto de mira. Resultado: el Messi menos participativo del Mundial aunque a la hora de la verdad, en la tanda de penalties de desempate, apareció para marcar el suyo sin despeinarse y muy parecido al que uno de sus referentes, Diego Armando Maradona, le marcó también en unas semifinales mundialistas a Italia en 1990. Las comparaciones crecían. Un gol de penalti en la tanda y no fue elegido Jugador del Partido.

Alemania-Argentina: 1-0

Volvió el mejor jugador del mundo en el partido más decisivo de su vida. No paró de correr en el primer tiempo, con acciones por la banda reconocibles del Messi de siempre. En la segunda mitad, ahí siguió, ahora más retrasado por el error de Sabella de quitar a Lavezzi por Agüero. Incluso falló el gol que podía decidir la final a los 47 minutos, aunque el perfil de la acción, por la izquierda, lo penalizó, pues sólo habrá marcado desde ahí un gol, al Zaragoza en La Romareda con el Barça hace varias campañas. Tiró paredes contra los alemanes, buscó siempre la verticalidad, se reconcilió con el fútbol pero perdió el Mundial porque el fogonazo ganador fue el de Götze. Tuvo una ocasión clara a los 47 minutos y no fue elegido Jugador del Partido.

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